Si hemos decidido emprender las vacaciones acompañados de nuestro amigo de cuatro patas, estas costumbres con las que aprendimos a convivir pasan a ser TERRIBLES para nuestros pares que buscan, al igual que nosotros, escapar del strees acumulado durante todo el año.
Seamos honestos, que nuestro perro se porte mal, nos da vergüenza.
Como no se puede enseñar a un animal de costumbre, a cambiarlas en una tarde, tenemos que tomar medidas de emergencia, para que las vacaciones las podamos disfrutar todos.
Lo primero es entender que la mente del perro tiene muchos switch que prenden y apagan ''estados mentales'', que pueden ser negativos: agresión, ladridos, ansiedad, etc. o positivos: jugar, relajación, sumisión, etc. Cuando nuestra mascota pasa de un estado negativo a uno positivo, se siente mas pleno, mas cómodo, mas relajado y notamos que, irónicamente, retar a nuestro perro lo hace mas feliz.
El famoso rollito de diario (puede ser también una ramita) que usaban nuestras abuelas, sigue siendo una forma efectiva de educar frente a una urgencia, cuando buscamos una respuesta inmediata. El rollito no debe infringir dolor, si lo usamos con ese fin, lo estamos usando mal. Lo que buscamos es la amenaza y sacar al perro de su estado mental.
Podemos con el, golpear el piso o tocar a nuestra mascota.
Hacer que nuestro amigo deje de hacer lo que esta haciendo (ladrar por ejemplo), para mirar con que tocaron su costado o para prestar atención al rollito que lo asusto tanto, apaga el switch negativo y enciende el de la atención, el respeto y la obediencia hacia sus lideres.
Tenemos también que saber que un perro completo en cuerpo y mente tiene muchísimas menos ganas de hacer macanas. Aproveche las vacaciones, madrugue, salga diariamente a hacer una larga caminata con su amigo, disfrute que aun hay poca gente en la calle, pase un rato con el. Este paseo va a satisfacer al perro, va a sentir que hizo ejercicio, que conoció lugares nuevos y que compartió un momento con su amo. Si su mascota es energética, repita el paseo a la tarde-noche.
Frente a perros ''desobedientes'' siempre es mas efectivo el uso del collar (colocado lo mas arriba posible) que el del pretal. Un tironcito corto en el momento justo desvía la atención, en cambio si usamos el pretal, cuando tiramos de el, damos poder, igual que cuando dos personas van a pelear y los agarran de los brazos!!! Solo se aumenta la furia!!!
Si vamos a un lugar en donde morimos de ganas de soltar a nuestra mascota para que corra y juegue, pero no tenemos la confianza suficiente para hacerlo, hay una alternativa: dejamos puesta una correa de 1 metro. Si llegara a ocurrir algún mal momento es un acceso rápido para que cualquiera tome el control del animal en segundos.
Los estados mentales positivos se refuerzan con premios. El premio no tiene que ser únicamente comida. Acariciar nuestro perro cuando esta tranquilo, relajado y en paz es un refuerzo muy grande, el va a entender que la tranquilidad trae caricias. Igualmente lo es felicitarlo cuando reacciona diferente a una situación conocida (Si cada vez que pasa un perro ladra y lo retamos, cuando pase un perro y NO ladre, felicitarlo, abrazarlo, jugar con el).
Por ultimo no hay que olvidar chequear el calendario de vacunación, realizar tratamiento para pulgas y garrapatas un par de días antes del viaje, siempre dejar colocado un collar con chapita identificadora, llevar agua fresca y un recipiente para ofrecerle agua en cualquier momento (no así el alimento, siempre va a elegir comer cuando finaliza la actividad del día).
No olvidemos:
NO HAY QUE CONFUNDIR CORREGIR CON MALTRATAR.
SEAMOS BUENOS DUEÑOS Y ENSEÑEMOS EL CAMINO A NUESTROS
PELUDOS AMIGOS.